Camiseta solidaria -

LA camiseta solidaria
y su historia

EL
DIAGNÓSTICO

Soy Lara Roca y en enero de 2023 me diagnosticaron
cáncer de mama.

Nunca hubiera imaginado que con 31 años me tocaría vivir una experiencia como esta. La incertidumbre es lo primero que aprendí a gestionar, porque no puedes controlar nada, sólo puedes confiar en el universo y en todo el equipo humano que está detrás de tu caso.

Es entonces cuando te sientes vulnerable. Ya había experimentado esa sensación y por eso siempre decía: «¡qué bien se está cuando se está bien!». Y cuánta razón tenía…

Bueno, el caso es que lo peor pasó, se confirmó el diagnóstico y se trazó una hoja de ruta. Soy técnica de turismo especializada en eventos, ¡así que necesitaba tener un plan y pasar a la acción! El plan era empezar la quimio para reducir y después operar. ¡Aquello ya era mucho mejor que no saber nada!

la quimio

Recuerdo el día de la primera quimio, ¡estaba eufórica porque había empezado! Ese día, con esa actitud, tuve la certeza de que para mí aquella sería la clave de cómo afrontar el proceso que apenas empezaba.

Cuando mi querido enfermero Jordi me dijo que a los 15 días de la primera quimio se me caería el pelo…

decidí organizar una Rapaparty con todas mis amigas para hacer de ese momento traumático un recuerdo bonito y divertido.

¡Lo que no sabía es que mis amigas, que son la hostia, organizaron la mejor despedida de pelo de la historia! Uno de los detalles que más me gustó fueron unas camisetas estampadas que llevábamos todas con un diseño y un mensaje de mi ilustradora y amiga Ingrid (Liomental). Ella supo plasmar perfectamente lo que es para mí la amistad: SUERTE y de ahí la frase que solemos decirnos: la suerte de tenernos.

Soy afortunada y, aunque recogemos lo que sembramos, hay un factor suerte que es tener unas amigas como las que tengo y a la que estaré eternamente agradecida.

recogida
de fondos

Bien, hecha esta introducción y viendo que las camisetas habían tenido tanto éxito, comenté a mi enfermero Jordi que quería recoger fondos vendiendo las camisetas para alguna asociación contra el cáncer. Y me explicó lo que hacían en el Mecenazgo de oncología de Althaia. Me pareció el mejor sitio al que destinar estas donaciones.

¿Por qué?

– El hospital de día de oncología antes era oscuro y poco acogedor y ahora es un espacio agradable y confortable para los pacientes y es en parte gracias al mecenazgo.

– Las actividades que se organizan para los pacientes de onco están muy bien pero, en mi opinión, faltaría un servicio de nutrición y de yoga oncológico.

– Olga de mecenazgo me ofreció formar parte de una campaña AMIKS donde Jordi Jorba (un donante y paciente de onco) y yo, entre otras personas, somos la cara visible de la campaña y no puedo estar más orgullosa.

– Vivir el retorno de estas donaciones en primera persona, y ver cómo se benefician mis compañeros del hospital de día de Oncología, me haría muy feliz.

Por estos motivos y por dar gracias a todo el equipo de onco y al hospital de día de Althaia, que hacen nuestro día a día más fácil, desde la empatía y la experiencia, quiero que esta pequeña aportación vaya para mi hospital 🙂